Entrevista en Artishock: Arte sonoro chileno se expone por primera vez en Europa

maggio 2017

(solo in spagnolo):

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ARTE SONORO CHILENO SE EXPONE POR PRIMERA VEZ EN EUROPA

El arte sonoro de Chile se presenta por primera vez en Europa, en el Museo de Arte Contemporáneo de Roma, MACRO. Bajo el título Otros sonidos, otros paisajes, la exposición que reúne a los artistas chilenos Rainer Krause, Claudia González, Fernando Godoy, Sebastián Jatz y Alejandra Pérez Núñez presenta sus trabajos de exploración sonora en distintos paisajes de Chile, desde el desierto de Atacama hasta la Patagonia.

La muestra es curada por Antonio Arévalo y Leandro Pisano y producida por la Embajada de Chile en Italia, Interferenze New Arts Festival, en colaboración con el Festival Tsonami Arte Sonoro. El propósito de las instalaciones sonoras que se presentan es “volver a leer y dar luz, a través de la perspectiva de la escucha, a la geografía e historias forjadas en los márgenes del contexto global”.

El artista Fernando Godoy, por ejemplo, captura la huella acústica del desierto de Atacama, en su obra Atacama 22º 54’ 24’’ S, 68º 12’ 25’’ W. En esta instalación la geografía del norte de Chile aparece como un lugar suspendido entre el pasado y el futuro. El sonido de edificios, rieles de tren, minas, el viento y la arena son parte del registro sonoro captado por el artista en esta obra.

Claudia González presenta la obra Hidroscopia/Mapocho, un proyecto que reúne grabaciones del río Mapocho de Chile, cuyo goteo puede interpretarse como “el sonido del paso del tiempo”, mientras que Sebastián Jatz presenta la instalación Conferencia de Pájaros Cantores, construida de acuerdo a los principios del arpa e inspirada en el trabajo de la cantautora y poeta Violeta Parra.

El artista Rainer Krause, por su parte, investiga la conexión entre el hombre y su territorio, a través del sonido. En esta muestra presenta la obra Lengua local 2: txt/contxt, en la que se puede escuchar la voz de la última mujer que habla la lengua yagán, un pueblo indígena que habitaba el extremo sur de Chile.

Por último, Alejandra Pérez Núñez muestra en el MACRO sus investigaciones sonoras en el territorio Antártico, registros de sonidos imperceptibles al oído humano para construir, al mismo tiempo, un mapa interactivo de sonidos de muy baja frecuencia capturados en tierra y bajo el mar.

“La reflexión sobre el tema de la alteridad de las voces del sound art en el hemisferio austral se entrecruza con una serie de elementos de búsqueda que involucran los paisajes, los lugares y la geografía chilenos, desde el desierto de Atacama hasta la Patagonia”, dijo Krause sobre la muestra.

Con este proyecto expositivo, el sonido emerge como un lenguaje y dispositivo autónomo, capaz de cuestionar los paradigmas formados y de superar el marco puramente musicológico.

Alejandra Delgado, de Tsonami Arte Sonoro, habló con Leandro Pisano, curador de la muestra.

Alejandra Delgado: ¿Por qué hacer una exhibición de arte sonoro chileno en Italia? ¿Cómo nace este proyecto?

Leandro Pisano: El proyecto de una exposición de arte sonoro de Chile en Italia nace de una serie de estudios y contactos que empecé a desarrollar hace unos años, durante mi investigación de doctorado realizada en la Universidad de Nápoles L’Orientale. Al mismo tiempo, también empecé a interesarme por el punto de vista curatorial de las prácticas sonoras de quienes entré en contacto, y de ahí nació la idea de iniciar una colaboración con el festival Tsonami y su director, Fernando Godoy, a quien invitamos a Italia el año pasado a una residencia artística durante [el proyecto] Liminaria, que se ocupa de sonido, tecnoculturas y territorios rurales. A partir de esta experiencia de colaboración desarrollamos la idea de trabajar en una exposición que permitiera crear un contacto entre el arte sonoro chileno y el público europeo, también un seguimiento de los contactos y la cooperación con la Embajada de Chile en Italia y el agregado cultural Antonio Arévalo, quien ha apoyado en los últimos años este puente cultural entre Chile e Italia, construido a través de la perspectiva del sonido. Otros Sonidos, Otros Paisajes es el resultado de esta dinámica y es, en efecto, la primera exposición que jamás se ha hecho del arte sonoro sudamericano en Europa.

A.D: ¿De qué forma se da la colaboración con Tsonami Arte Sonoro para realizar esta primera muestra de arte sonoro sudamericano en Europa?

L.P: La idea sobre la que se construye la exposición fue, precisamente, centrarse en el trabajo experimental, la difusión y la investigación llevada a cabo por una serie de artistas que entraron en relación en mayor o menor medida con Tsonami Arte Sonoro en los últimos años. Con Fernando Godoy discutimos mucho tiempo juntos en la pre-producción y selección de obras y artistas. Tsonami acababa hacer la exposición Señales Aleatorias con motivo del décimo aniversario de su festival, y también este tipo de experiencia ha sido una referencia importante para pensar en formas de curatoría y el ajuste de la exposición. En este sentido, el diálogo constante con Tsonami representó un punto de partida fundamental para llegar a definir toda la exposición.

Alejandra Pérez Núñez, Great Island of Fire Land, 2015. Vista de la exposición “Otros sonidos. otros paisajes”, en el MACRO, Roma, 2017. Foto: Giuliano Mozzillo A.D: ¿Puedes contarnos más de qué trata la curatoría y cómo se desarrolla?

L.P: El tema curatorial de la exposición es la intersección de dos consideraciones: en primer lugar, el hecho de que el sound art, reconocido como una disciplina y categoría generada por una serie de modelos de conocimiento relacionado con la tradición cultural de Europa Occidental y de la angloesfera, se revela hoy como medio en el que emergen una serie de prácticas que insisten en “otras” coordenadas geográficas, estéticas y culturales. Por otro lado, la consideración de que, a través de la perspectiva del sound art el sonido, elemento menudo subordinado a la esfera visual y en discursos de arte, emerge como un dispositivo independiente, capaz de interrogar a un número de paradigmas constituidos, superando un encuadre puramente musicológico. En este campo en expansión, sentimos que era importante concentrarse en el trabajo desarrollado en Chile en las últimas décadas, por artistas que han experimentado con métodos y procesos en los que el sonido se cruza con las tecnologías digitales y enfoques no convencionales a escuchar. En este sentido, esta exposición representa un espacio crítico en el que la reflexión sobre el tema de la alteridad de entradas de arte sonoro en el hemisferio sur se entrelaza con una serie de elementos de investigación que implican paisajes, lugares y zonas geográficas chilenas, desde el desierto de Atacama hasta la Patagonia, desde la periferia de Santiago hasta la región del Bío Bío, que rayan en el extremo sur, hacia la Antártida. Otros Sonidos, Otros Paisajes es el intento de trazar las trayectorias de escucha a insistir en un Sur que no es una categoría geográfica, sino política y epistemológica.

A.D: Tú realizaste una investigación doctoral en arte sonoro sudamericano ¿Qué te llevó a centrar tu atención en estas prácticas del hemisferio sur? ¿Cuál es tu impresión de cómo está desarrollándose el arte sonoro en Chile y Sudamérica?

L.P: Mi impresión es que hay una riqueza y una variedad de prácticas que, aunque en diferentes contextos, proponen temas de investigación pertinentes, pero todavía están luchando para ser tenidos en cuenta en la escena europea. En este sentido, el trabajo de construir contactos y colaboraciones, que Tsonami Arte Sonoro está llevando a cabo en los últimos años, abriendo el arte sonoro sudamericano a una dimensión totalmente internacional, es sin duda un elemento muy importante. Creo que la muestra Otros Sonidos, Otros Paisajes es un momento significativo en este sentido, haciendo visibles estas prácticas incluso en un contexto exterior de Latinoamérica.

A.D: ¿Cómo ha sido la respuesta dentro de las escenas de arte sonoro, arte contemporáneo y el público italiano a esta muestra? ¿Cuáles son las proyecciones que tienen?

L.P: La respuesta y la atención en Italia fueron notables, hemos registrado un gran interés por parte de los críticos, curadores, artistas y coleccionistas. La idea es traer la exposición en un futuro próximo también a otros países europeos y, al mismo tiempo, continuar desarrollando programas de intercambio entre Italia y Chile. Este año tendremos en Liminaria como artistas en residencia a Nataniel Alvarez y Sandra Ulloa de Encuentro Lumen/Colectivo Última Esperanza, y ya estamos trabajando con Tsonami para otras colaboraciones posibles el año 2018, tanto en Europa como en Chile. Tenemos varios discursos abiertos, entre ellos la posibilidad de publicar la edición chilena de mi nuevo libro Nuove geografie del suono. Spazi e territori nell’epoca postdigitale [Nuevas geografías del sonido. Espacios y territorios en la época postdigital], con un apéndice dedicado específicamente a las prácticas sonoras desarrolladas en Chile en los últimos años.